Para los que no me conocen, me llamo Alberto Nadra. Milito desde los 13 años. Fui dirigente estudiantil y sindical; miembro del Comité Central del Partido Comunista y director de su semanario hasta mi renuncia, en 1989.
En los años ’70 fui uno de los fundadores de las Juventudes Políticas Argentinas (JPA) y jefe de Redacción para la agencia cubana Prensa Latina durante la dictadura, labor que me valió el premio de la Organización Internacional de Periodistas (OIP), por la defensa de los derechos humanos en ese período.
Soy docente universitario y periodista. Jamás ocupe un cargo público ni fui candidato por ningún partido. Sin embargo, he decidido aceptar la invitación a participar en las PASO del Frente para la Victoria (FpV), como candidato a legislador en la lista Espacio Abierto-ALUVION.
Para los que me conocen, nada debo agregar. Todos saben que sigo y seguiré siendo marxista; que jamás aflojé y que no vacilé en poner en juego mi libertad y mi vida para defender a muchos compañeros en la Argentina y en el mundo.
Digo con esperanza a mis ex camaradas, y compañeros de militancia de las Juventudes Políticas Argentinas de los 70, que la izquierda que no bajó sus banderas dirá presente con sus hombres y mujeres en una lista con perfil propio para participar de la interna del Frente para la Victoria, junto a peronistas combativos y radicales probados, que tampoco renuncian a sus ideales nacionales y populares.
No se trata de un rayo en cielo sereno. Es el fruto de más de un cuarto de siglo de reconstrucción y construcción de muchos compañeros quienes, como yo, fueron raleados de los espacios públicos, pero jamás de la lucha.
Asumo este nuevo compromiso en un contexto más abarcativo en la ciudad y en la Nación, donde nuevamente se disputa si se continúa construyendo la Patria hacia el futuro o se retrocede de manera nefasta hacia la restauración conservadora, que es lo que se pretende imponer desde la oposición, pero que expresa cabalmente Mauricio Macri en el país, con su cabecera de puente en los indiferenciados Horacio Rodríguez Larretay Gabriela Michetti.No me mueve resentimiento alguno, y con mis compañeros pretendemos ser parte de una construcción que no niegue la historia, pero que sea luz para lo nuevo que debe nacer, sin aferrarse a lo viejo que ya murió.
Nuestro país siempre necesitó una izquierda que entienda los procesos de cambios estructurales como “creación heroica” de nuestros pueblos, con humildad y respeto.
Hoy, después de una ardua tarea, comenzamos a ver los primeros frutos de una nueva etapa. Somos la izquierda que construye y no se diluye. No nos ocultamos ni disfrazamos. Somos, simplemente, quienes somos. Del mismo modo en que lo éramos cuando decirlo significaba perder la libertad y, para cientos de los nuestros, la muerte. Y sólo en tanto sigamos siendo podemos sumar a una nueva identidad en este siglo XXI.Más de 12 años han pasado desde que un hombre me convocó a la formación de un frente nacional y popular, encabezado por un peronismo que recuperara el compromiso con los humildes, y sus banderas de Justicia Social, Independencia Económica y Soberanía Política. Un frente que soñamos, juntos, con activo protagonismo de fuerzas y personalidades que provenimos de diversas culturas dentro del movimiento nacional y popular, para ir construyendo una nueva identidad que nos abarque, y nos permita contar con toda la fuerza necesaria, y unida, para lograr un modelo de producción y trabajo contrario al saqueo neoliberal.
“Si este compromiso se lleva a los hechos, estamos ante una ineludible oportunidad para quienes buscamos una alternativa distinta en el país”, declaré ante la agencia Télam aquel caluroso 5 de febrero de 2003, luego de visitar al entonces gobernador de Santa Cruz, y candidato presidencial, Néstor Kirchner. Y de ese modo, aunque las encuestas lo ubicaban apenas en un dígito, manifesté mi apoyo y el mis compañeros.
Porque, dije entonces y repito ahora, “La opción es vagar entre el principismo testimonial y la observación críticamente académica de los hechos, o embarrarse en la construcción de un espacio que conjugue la voluntad de tantos malheridos por las sucesivas derrotas y frustraciones del campo popular, y de mi generación en particular, para incidir en los acontecimientos y crecer en el proceso”.
Como candidato puedo decir sin soberbia que fui parte de los pocos que acompañamos a Néstor en 2003, mientras que otros llamaron a votar en blanco, o a diferentes candidatos, mientras hoy posan de cruzados del proyecto nacional y popular, que ostenta el liderazgo de Cristina.
Bienvenidos fueron cuando llegaron, y respetados son hoy. Pero que ninguno pretenda juzgar desde la obsecuencia el compromiso con el proyecto nacional y popular de los que pusimos el cuerpo y las ideas desde el primer momento.
Sin abandonar nuestras críticas y propuestas, ni nuestro reclamo por el “Siempre más”. No podemos consolidar lo conquistado sin avanzar con decisión en lo que falta.
Aluvión Ciudadano, la Agrupación Vallese y La Che enfrentamos al neoliberalismo depredador en la Ciudad, en algunos casos avalado en la legislatura por compañeros que votamos para resistirlo.
Nosotros impulsamos la REVOCATORIA DE MANDATO DE MACRI Y VIDAL, a través de un referéndum, como contempla la Constitución porteña, en intensas jornadas militantes en parques, plazas y calles, promoviendo la democracia directa y el protagonismo popular. Mientras tanto, el resto de las fuerzas del campo nacional y popular en la ciudad se limitaban a observar u oponer una mezquina mirada sobre lo factible; a veces, con la ilusión de fortalecer a un adversario para debilitar a otro.
“A la derecha ni un tantico así”, advertimos parafraseando a nuestro Che. No se puede dejar crecer a la derecha. Tampoco, confiar en las maniobras de cúpulas, ni desconocer que es con la participación popular que se enfrenta frenar al neoliberalismo. Hoy enfrentamos las consecuencias, y la presentación de nuestra lista implica esa crítica, pero con la mano tendida a nuestros compañeros de las otras listas, y un único compromiso: con la defensa del presente y con las conquistas futuras.
Enla Ciudad se libra una momento decisivo en la acumulación de fuerzas para enfrentar la restauración conservadora que expresa el acuerdo de la derecha de la UCR y el PRO, y como candidato al legislador de la alianza electoral Espacio Abierto-ALUVIÓN, uno mi esfuerzo a una convocatoria política colectiva, de vocación frentista y transformadora.
Este 26 de abril llamo a votar la lista COMPLETA que encabeza Carlos Oviedo como candidato a Jefe de Gobierno en las PASO, y me comprometo a dar un APOYO SIN VACILACIÓN A QUIEN RESULTE ELEGIDO por la militancia y la ciudadanía.
Para ello, para fortalecer el FPV, darle toda la potencia hacia las elecciones de la Ciudad del 5 de julio, y las generales de octubre, la mayoría de quienes fundamos LA CHE nosSUMAREMOS EL MISMO 27 de abril a la CONSTRUCCIÓN DE UN NUEVO PARTIDO con proyección nacional.
Un partido con plena personería, en la calle y ante la justicia electoral, con amplia base territorial propia, que no dude en decir SI a la ampliación y pluralidad del Frente para la Victoria porteño.
Un partido que diga SI a la confrontación real con el macrismo y la restauración conservadora, sin concesiones a sus leyes regresivas en la Legislatura.
Un partido que diga SI al “Siempre más” del proyecto nacional y popular; que no vacile en criticar lo que no comparte y reclamar lo que falta, con la mano tendida a compañeros de otras organizaciones para a lograr, juntos, la fuerza necesaria para llevarlo adelante.
Un partido que, en definitiva, diga SI a la constitución del kirchnerismo en una nueva identidad totalizadora del movimiento nacional y popular, en marcha a esa Argentina grande y justa que soñaron los héroes que la fundaron, y los mártires en el camino de la segunda y definitiva Independencia.
Con mi esperanza
Alberto Nadra